el aura y su vibración

Según Walter Benjamin la obra de arte posee un aura que la vuelve única e irrepetible: esa aura sería la manifestación de una lejanía, por cercana que esta pudiera estar.
Su vibración trasciende cuando se manifiesta como respiración única, allí donde lo oculto se vuelve reconocible, donde lo íntimo se enuncia en palabra o en gesto hacia la luz: porque la revelación no se expone sólo en lo dicho, sino también en lo vital.
La poesía y el arte expresan, y al mismo tiempo fluyen como representaciones esenciales de un misterio que no se revelará jamás.
Nuestra revista se instala en los márgenes, allí donde lo intangible se funde con la realidad.
Aborda la palabra y la imagen desde sus inicios hasta que ellas se convierten en concepto y emoción. Ofrece alternativas a todos aquellos que perciben el latir cifrado de lo poético y de lo visual, hilos de Ariadna siempre tendidos hacia lo invisible. Creemos en la poesía como energía que resiste a los encasillamientos de las categorías, como fuerza que se rebela a clasificaciones y definiciones -caras a una época y sus cánones- formuladas con el fin de someterla.
Creemos en un arte que resuena como eco de lo innombrable.
Cada página de El aura será una superficie a explorar, donde la poesía y las formas expanden sus fronteras hacia un horizonte de convocatoria y de cuestionamiento.
El aura propone un diálogo con aquello que falta.
Expresa la fugacidad en la contemplación del instante que huye.
Impone la presencia de aquello que al ser rozado se desvanece.